Brexit: la mirada desde las cooperativas, las mutuales y los expertos legales
El referéndum sobre la salida del Reino Unido de la Unión Europea tendrá lugar el 23 de junio. Se consultó a representantes del movimiento cooperativo sobre cómo la eventual esta eventual, o “Brexit” (British Exit), afectaría a las cooperativas. En este artículo se expresan las opiniones desde los sectores cooperativos y mutuales, hasta los expertos legales sobre cooperativas.
La visión del sector energético
Emma Bridge, directora ejecutiva de la Comunidad de la Energía de Inglaterra.
Sería mejor para nuestro sector permanecer en la Unión Europea. Muchos grupos están buscando fondos de la Unión para probar nuevos modelos, y además, Europa es una fuente de buenos ejemplos sobre cómo hacer energía comunitaria.
El Reino Unido no tiene una mirada sustentable ni de largo plazo sobre la energía y, en la práctica, no es defensora de la energía renovable como puede observarse en las políticas de los últimos 12 meses. La Comunidad se ha unido a RESCoop, la Federación Europea de Cooperativas de Energía Renovable. Consideramos que seremos más fuertes si estamos unidos, lo que generará más oportunidades para influir en la nueva Dirección Europea de Energía Renovable.
Sin embargo, las directivas de la Unión Europea han causado algunos problemas a la Comunidad de la Energía por lo que existen algunos contras en la asociación a la Unión, tales como las complejas reglas sobre la participación estatal que conllevan mucho tiempo para concretarse, y los precios mínimos de importación para los paneles solares.
La visión desde las mutuales
Peter Hunt, Director Ejecutivo de Mutuo
En un mundo cada vez más interdependiente, no tiene sentido alejarse de la posibilidad de cooperar con nuestros vecinos europeos. Los estándares para regular los servicios financieros, por ejemplo, seguirán siendo elaborados a nivel europeo, por lo que debemos asegurarnos ser parte del proceso de toma de decisiones.
Como una empresa internacional, Mutuo comprende los beneficios reales de compartir el conocimiento con sus colegas europeos. En los últimos seis meses hemos operado en seis países diferentes; las reglas sobre negocios conjuntos de la Unión Europea establecen que podemos comerciar con las cooperativas y mutuales en cualquiera de los 28 países. Separarse de la Unión destruirá la oportunidad de cooperar.
Martin Shaw, CEO de la Asociación de Mutuales Financieras (AFM) y miembro de la Federación Internacional de Cooperativas y Mutuales de Seguros.
Las mutuales de seguros en el Reino Unido crecieron rápidamente durante la revolución industrial al servir a las comunidades y comercios locales, y hoy, continúan trabajando como parte de esas comunidades.
Los miembros de todas nuestra mutuales viven en el Reino Unido, emplean aquí a sus trabajadores, pagan aquí sus impuestos e invierten sus activos en empresas y en el gobierno del Reino Unido.
Independientemente del resultado en el referéndum de junio, con el foco únicamente en el servicio a los consumidores del Reino Unido, las mutuales no cambiaran un modelo de negocios que les ha permitido crecer más rápidamente en los últimos años que al resto de la industria de seguros en su conjunto.
Si existe una decisión de salir de la Unión Europea, el impacto más probable sobre las mutuales será el efecto que sufrirá la economía en su conjunto, por ejemplo el clima de inversión, las tasas de interés y la prosperidad económica general.
La regulación es otra cuestión clave: en los últimos años la mayoría de las regulaciones sobre seguros emanaron desde la Unión Europea, particularmente desde Solvency 2.
Gran parte de las reglas establecidas por el Reino Unido deben ser reescritas, a pesar de que los reguladores del Reino Unido abracen las reglas europeas, y cuestiones como la protección al consumidor y la administración eficaz son ahora universalmente aceptados, no queda muy claro si el tono regulatorio cambiará significativamente.
De manera más general, la naturaleza del mutualismo se trata de reunirse para crear soluciones conjuntas a problemas comunes. Por esto, esperamos seguir trabajando juntos y aprendiendo de las experiencias de otras mutuales, ambas acciones tanto dentro como fuera del Reino Unido, más allá de lo que suceda.
La visión de un experto legal cooperativista
Ian Snaith, abogado consultor de DWF LLP
Las recomendación de la Unión Europea de 2004 sobre el fomento al desarrollo cooperativo ya no se aplican aquí y las cooperativas del Reino Unido no pueden usar la Sociedad Cooperativa Europea. Esto es un efecto limitado debido a que la declaración de la Comisión no es ley y no hay sociedades cooperativas europeas registradas en el Reino Unido.
Las mayores consecuencias del Brexit dependen de los tratados comerciales que se negociaran después. En este sentido, el comercio del Reino Unido con el resto del mundo se verá afectado. Los términos comerciales con la Unión Europea, Estados Unidos, China y otros países, podrían cambiar de manera impredecible.
Los negocios del Reino Unido perderán el derecho automático de reclutar trabajadores en otros países europeos, establecer empresas y vender bienes y servicios. Las tarifas a las exportaciones del Reino Unido crecerán junto a otros obstáculos. Si no se establece al Reino Unido una garantía de acceso al mercado europeo, dejara de ser un destino atractivo para las firmas extranjeras, como las empresas automotrices de Japón.
Los euroescépticos argumentan en contra de la "carga reguladora" impuesta por la Unión Europea. Sin embargo, las vacaciones pagas, las licencia y pago por maternidad y paternidad, las leyes contra la discriminación, y la protección para los trabajadores, todos ellas provienen de la legislación europea. La directiva sobre el "tiempo de trabajo" limita las horas laborales a un promedio de 48 horas a la semana, a menos que el trabajador dé su consentimiento a trabajar más horas.
Todo esto desaparecerá a menos que el gobierno del Reino Unido esté dispuesto a retener o mejorar esas condiciones. Los agricultores británicos también perderían miles de millones en subsidios de la Unión Europea. El mayor problema si el referéndum sale a favor del Brexit, será la incertidumbre sobre el futuro.
La libra esterlina y los mercados serían más inestables. Los recursos gubernamentales estarían atados durante al menos cinco años a la pesadilla de tratar de desentrañar los 40 años de integración jurídica y económica con nuevos acuerdos comerciales.
¿Haría el gobierno mucho más en este tiempo?
Fuente: Cooperative News
Traducción: Economía Cooperativa